MALDIVAS

Uno de los paraisos terrenales que existen en el mundo refulge en medio del mar como una esmeralda haciendo señales al viajero en busca de la paz que sólo el aislamiento puede ofrecer. Y no hay mejor aislamiento que perderse en una de las innumerables islas del archipiélago disfrutando de algo que Maldivas ha conseguido patentar como marca propia: el buen gusto.
El contraste entre el verde de sus palmeras, el blanco de sus playas y el azul de sus aguas sería reclamo suficiente para el amante de las costas y el mar, pero bajo la superficie de ese mar azul se esconde el otro secreto de las islas que las hace inolvidables. Un paisaje submarino tan variado y rico como el que puede ofrecer países mucho más grandes sobre la superficie del mar.
Ideal para los amantes de las playas tranquilas y la autocontemplación.