MAURICIO

Isla remota, antaño casa de piratas y colonizadores criollos. Hoy Mauricio abre sus puertas a los viajeros deseosos de playa sin renunciar a la posibilidad de visitas culturales o de turismo activo. Pero Mauricio hoy, como siempre, juega su mejor carta en el contacto directo con la gente, en el exquisito trato que la amabilidad y la cortesía mauriciana llevan siglos practicando y que convierte este paraíso natural en un paraíso para el alma. Ideal para novios, viajeros necesitados de descanso y privacidad y para los que quieran una experiencia playera sin acumulaciones, con servicio personalizado, cuidado y preocupado por lo que importa, el propio viajero.